El significado de la palabra lealtad en la personalidad paranoica o la humanidad está compuesta de una banda de fariseos.
Es casi imposible solicitarle a alguien que confié en ti, si tú no has construido el concepto de confianza dentro de ti mismo. La confianza es como un edificio que entre más fuertes sus cimientos mas alto puedes llegar en la construcción de relaciones; al contrario siglos cimientos no son sólidos, se tiende a instalar la desconfianza.
¿Si el objetivo de una relación es intercambiar estados mentales y afectivos, ¿cómo, desarrollar una relación sana con alguien supremamente desconfiado?
Henrytustra se encontraba en esta casa llena de miradas desconfiadas. Hay contextos que desarrollan más paranoia que otros. En esta casa sentirse observado parecía común. En la casa del paranoico todas las habitaciones parecían esconder un tesoro, todas fuertemente protegidas.
Henrytustra se dirigió al primer cuarto, ahí comenzó a descifrar una a una las características más profundas de la mente de la personalidad paranoica.
-ingresa plebeyo. No me gusta recibir visitas sin previo aviso, son cuestiones de seguridad. Necesito primero asegurarme del historial de mis visitas. Apuntó la personalidad paranoica.
-mi historia es lo que llevo puesto. Si soy grande o pequeño, es una percepción y una interpretación que le dejo a los otros. Algunos tienen tiempo para vivir preocupados de los demás. Ripostó Henrytustra.
-ya me habían dicho que eres contraintuitivo, plebeyo. Te crees un maestro en el estudio del comportamiento humano. Te diré una verdad: todos son humanoides son plebeyos y fariseos, les falta lealtad; siempre están pensando en buscar una forma de ser desleales. Soy brillante y me gustaría que todos fueran tan brillantes como lo soy yo, pero ellos no piensan como yo, les falta tener mi pensamiento, algunos tienen otras ideologías que son inferiores. Para mi, los peores son los que practican otra religión. Son unos traidores, traicionan a Jesús y a Dios, y si los traicionan a ellos me traicionan a mi. Somos muy pocos los que realmente conocemos la palabra del señor. Somos muy pocos los que entendemos el mensaje. Somos pocos los honestos y leales.
Los sujetos que presentan una personalidad paranoica buscan ejercer un control del otro a través de temáticas en las cuales tienen la convicción que poseen un conocimiento extraordinario. Ellos buscan aliados excluyendo rápidamente a aquellos que no adhieren a sus convicciones. Las conversaciones con estos sujetos se convierten en monólogos monotemáticos en los cuales piensan que siempre tiene la razón. Estos sujetos consideran que la mayoría de personas son deshonestas y desleales. Para ellos, su compañero de trabajo quiere hacerlo despedir del trabajo; un vecino desea robarle una parte de su propiedad; un religioso piensa que su amigo no es completamente fiel a la iglesia. En las divergencias de opinión, la personalidad paranoica considera que el otro no es fiel a su convicción y por lo tanto está en su contra. Cuando están en pareja, se sienten confortables solamente si el otro está siempre en acuerdo con sus ideas, de otra forma se irritan y pueden volverse agresivos en sus propósitos.
De todo hay en la viña del señor, se dijo Henrytustra en su interior. En algunas relaciones se desarrollan las patologías complementarias. En este caso, la personalidad paranoica requiere de un humanoide que siempre esté de acuerdo con ella. Muchos humanoides quieren estar siempre de acuerdo con lo que el otro le dice. Así se han creado grandes sectas en la historia de la humanidad. Sin embargo, el problema aquí es que éste humanoide se vuelve agresivo cuando el otro no está de acuerdo con él. Henrytustra intervino así: la lealtad es un valor que se gana en el campo de batalla. La lealtad no se impone. Mediante acciones debes ganar la lealtad. Veo que exiges lealtad y que buscas en los detalles los más mínimos errores para juzgarlos. Eso quiere decir que sólo consideras tu punto de vista, el cual parece muy subjetivo. Debes conectar tu mundo al mundo de los demás. Debes permitir que tu interpretación sea permeable a la interpretación de los demás. De otra forma seguirás cerrado al mundo. La lealtad se gana con mucha apertura. Recibe al otro con los brazos abiertos”. Así hablaba Henry Mosquera
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