El organizado mundo del obsesivo

El organizado mundo de la personalidad obsesiva-compulsiva, o alineando y cubriendo,  arrrr.



El mundo de los humanoides parece concentrado en aquello que pueden percibir los sentidos en el primer plano.  De hecho, muchos humanoides pasan sus vidas concentrados sólo en aquello que se puede observar. Sin embargo, lo más interesante se encuentra en aquello que el humanoide oculta tras sus comportamientos,  en muchos casos contrario a aquello que piensa y de hecho censurado por el grueso filtro de las defensas.  Cuan más sólidas son las defensas en el humanoide, más tendencia tiene éste a repetir patrones que lo instalan en zona de confort.

Henrytustra avanzó sobre el corredor de aquella casa cuyas habitaciones se encontraban en hilera con muy poco sentido estético, pero a la larga muy funcionales. Ingresó sin mucho protocolo a la habitación siguiente. En ésta se encontraba la personalidad obsesiva-compulsiva sentada frente a una mesa organizando los cubiertos, cucharas con cucharas, cuchillos con cuchillos. En los cajones de la cocina, las conservas estaban organizadas por tamaños y los vasos seguían un patrón de colores.  Se observaba en la parte trasera algunos libros organizados en orden descendente.  Por doquiera que se observaba, se constataba que todos los objetos estaban sometidos a un orden particular.  


-No te muevas mucho querido invitado, Insinuó la personalidad obsesiva-compulsiva. No quiero que tus movimientos bruscos desorganicen lo que debe tener un orden. Cada cosa en su lugar. Es primordial que todas las cosas de mi casa se encuentren alineando y cubriendo. Pienso constantemente en el control de los espacios. Realmente la organización se debe hacer como yo lo diga, los colores van con los colores, los tamaños en su debido orden. Por favor córrete un poco que no estás alineando con la puerta. 


La personalidad obsesiva-compulsiva es supremamente exigente consigo misma, sobretodo en lo que atañe al perfeccionismo. Para esta personalidad todos los objetos dentro de una casa o en su trabajo llevan un orden y ese orden debe alcanzar la perfección. Esta personalidad verifica en múltiples ocasiones que las cosas estén bien organizadas. Es una personalidad que va a tomar varias veces la misma medida; cada que pasa por el mismo sitio tiene tendencia a buscar ángulos para confirmar que sus objetos estén  bien alineados.  En su cotidianidad puede tener problemas para terminar sus trabajos porque nunca estima que ha llegado a la perfección. Esta personalidad demuestra trazos de psicorígidez, se obstina con facilidad cuando ve que los demás no hacen las tareas con la misma perfección que él cree hacerlas. 


Me siento fijado como una estatua, pensó Henrytustra.  La personalidad obsesiva-compulsiva tiene la capacidad de controlar su hábitat de tal forma que ese control se expande hacia los que se encuentran cerca. En el caso que quisiera tocar algún objeto de esta alcoba, había que pensarlo muchas veces ya que la personalidad obsesiva-compulsiva está siempre pendiente. Henrytustra observando cuán bloqueada estaba esta personalidad se dirigió así: 


-El orden y el desorden, dos factores físicos que condicionan el manejo de un espacio. Las cosas se parecen a su dueño,  cada espacio es el reflejo de lo que las personas tienen en su universo psíquico.  Si lo tuyo es el orden es que no aceptas que los objetos se muevan y tomen nuevas direcciones. Eres psicorígido con el control. Tu dinámica diaria consiste en guardar un control y no dejar escapar nada. Todo lo que no está alineando y cubriendo se sale de tu control, lo pierdes y eso es inaceptable para ti. Abre tu mente, deja escapar tus ideas, deja que las ideas de los otros ingresen en ti, acepta el caos y organízalo cada día de forma diferente,  ese es el principio de la improvisación,  algo que debes cultivar. Así hablaba Henry Mosquera. 


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