No mendigues amor

La anticipación negativa en el amor o nunca mendigues amor

En otro cuadro aparecían los que lloraban por la pena de amor.  

-“Henrytustra no hables del amor, eso es muy largo!” Exclamaron los acompañantes de aquel auditorio.  

-“No es del amor de lo que voy a hablar, es de la ansiedad para lanzarse al amor, lo que traigo en esta cápsula. El amor es satisfacción mental, espiritual y corporal. Existe en el telón del camino de la vida un sin número de personas que sufren por llegar a ser amadas, por tener una pareja estable. Existen los que imploran amor y los que lo declinan. ¿Has visto un bebé,  cuando su madre se va? Está ansioso por verla regresar. En algunos casos hace la pataleta cuando no regresa pronto. Esa es la ansiedad de lo desconocido en el amor. Conocí a esa persona que fue defraudada en la relación, humillada, despreciada y traicionada.  Comprendí que no es fácil levantarse de eso. Esta persona se sentía fracasada. Pasaban los años y no tenía la disposición suficiente para acoger a otra persona. Así se manifestaba su ansiedad de fracaso en el amor. Es la anticipación negativa de que la nueva relación no va a funcionar. Este tipo de ansiedad deja a la persona perpleja, puede caer en estados depresivos. Pierde la motivación, cree que el mundo se está acabando si su vida no se hace al lado de aquel o aquella que partió. La ansiedad del fracaso en la ruptura puede congelar los sentimientos de un humanoide. Esto puede impedirle pasar al nivel superior en el manejo de sus emociones. Algunos se pueden automedicar con alcohol o drogas,  otros buscaran el asilo en el sexo compulsivo, otros partirán…”.

Henrytustra observaba este sufrimiento del humanoide y sufría también.  Con el corazón en la mano se le escuchó decir: “cuando sientas que estás paralizado porque piensas que nadie te va a amar, no compres cariño,  no mendigues amor. Obsérvate tu mismo y dale amor a tu propio corazón.  Sólo si curas esta herida estarás dispuesto a acoger a otras personas que están ahí.