Y cuales son los fantasmas del Narcisista? o, se me olvidaba decirte que tengo unos secretos que me da vergüenza contar.
Una parte del salón estaba completamente oscura. Los cuadros se encontraban cubiertos de un paño negro. Henrytustra observó debajo de uno de ellos y percibió una réplica del retrato de Dorian Gray. ¿Qué hacía este cuadro aquí? Movido por la curiosidad y el deseo de ayudar a la personalidad Narcisista a conocerse mejor, Henrytustra ingresó a la siguiente alcoba. No era una, en realidad se trataba de compartimentos de lo que parecía ser una misma alcoba, espacios divididos. En cada uno de ellos se percibían movimientos sigilosos de entes que querían pasar desapercibidos, eran los fantasmas. ¿Y que son los fantasmas? Pues, el prisma con el que se percibe la realidad. Un ser invisible que llevan los humanoides por dentro y que raramente logran descifrar. Algunos de ellos rechazados y otros perseguidos, siempre ocultos bajo mecanismos de defensa sorprendentes y hasta rígidos. Entró en un compartimento. El fantasma apenas visible le comentó:
-Estoy dentro de la personalidad Narcisista y esta pobre está tan preocupada por su imagen que niega lo esencial. Soy el fantasma del Amor ideal de la personalidad Narcisista. El Amor ideal soy yo mismo. No tengo tiempo ni espacio para ocuparme de nadie más. No tengo el más mínimo interés en otra persona que no sea adorarme yo mismo. Freud hubiera dicho que soy un homosexual porque me quiero a mí mismo que soy del mismo sexo. Freud tal vez tenía alguna aberración sexual, el pobre. Yo sencillamente soy un onanista, el placer que busco lo encuentro en mí. Sin embargo los humanoides se me acercan, quieren estar conmigo, ya tú sabrás por qué. Y entonces empieza el juego de la hipocresía. Los demás son para mi sólo decoraciones, ornamentos que puedo mover como en un tablero de ajedrez. Si escojo una pareja, debe ser únicamente por la decoración que me puede brindar ante la sociedad. Generalmente, mis elecciones de pareja se hacen por criterios de belleza física o de una cuenta en el banco. Algo que me permita mostrarla en sociedad y que me brinde la tranquilidad de espíritu de ser halagado. Y si, no creo en el amor, yo no tuve de eso cuando chico, creo en el valor que la belleza o el dinero de mi pareja me pueda dar.
Las relaciones de pareja son complejas en la personalidad Narcisista. Son sujetos que verbalizan un amor ideal, el cual en el fondo son ellos mismos. Evidentemente este amor ideal nunca lo van a encontrar porque se trata de un ser imaginario. Mientras encuentran el amor ideal, estos sujetos van a utilizar las parejas como un objeto de satisfacción personal. Las parejas serán intercambiables porque no se crea un vínculo fuerte. Estas relaciones son superficiales, basadas en la belleza o en el dinero, son flor de un día. La personalidad Narcisista no logra mantener relaciones largas y duraderas ya que paulatinamente comienza a ver todos los defectos de su pareja. Si la belleza o el dinero faltan, la razón de ser de la relación deja de existir.
Henrytustra trató de agarrar al fantasma, pero este era volátil e inestable, prefirió entonces bailar con él, con una cadencia que no llevaba el mismo paso. Comprendió entonces que el fantasma de la personalidad Narcisista lleva una agenda programada a la cual es difícil proponer otro ritmo. En un descuido del fantasma, Henrytustra se acercó diciendo:
-Todo lo que brilla no es oro. Otros metales también brillan. Lo importante es que cada quien encuentre su propio brillo. Ten por seguro que si entras en el círculo de utilizar a los demás, tú también serás utilizado para un fin, lo que te convierte en esclavo de tu objeto. El amo siempre es un esclavo. Aprende a amar a los otros con sus cualidades y sus defectos y tendrás en retorno posiblemente un poquito de amor. Así hablaba Henry Mosquera
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